George Orwell: un adelantado a su tiempo

 George Orwell: un adelantado a su tiempo

George Orwell, el célebre escritor británico del siglo XX, contribuyó, por medio de sus obras, a mejorar una sociedad con unas ideas revolucionarias. Gracias a sus novelas y sus ensayos, se produjo un cambio en la literatura que ha perdurado hasta hoy. 



Su intensa vida le permitió ejercer en diferentes campos profesionales, aunque muchos de ellos relacionados con la escritura, lo que más le apasionaba. Escritor, corresponsal de guerra, poeta, ensayista, periodista, crítico literario, librero, guionista y publicista, Orwell es sin duda uno de los autores más elogiados de la historia. Desde casi siempre tuvo una ideología progresista, la cual se acentuó más durante los años que pasó en Birmania trabajando en la Policía Imperial, que ha plasmado en cada una de sus obras con un talento propio de un genio como él. 



Con su libro, Rebelión en la Granja, transmitió una visión dura y realista de la sociedad en la que viven las personas de los países sometidos bajo el totalitarismo. A través de los ojos de animales, el lector presencia cómo las revoluciones, algo que debería beneficiar a todos, pueden llevar a una dictadura si algunos deciden hacerse con el poder absoluto, como tantas veces ha ocurrido en el transcurso de la historia. En la fábula, vemos claramente un ejemplo de la realidad, ya que uno de los cerdos (protagonista, que da la especie de “golpe de estado”) se llama Napoleón. Si miramos al pasado, recordaremos la revolución francesa, en la que participó activamente Napoleón, y luego implantó un régimen totalitario en el que él poseía todo el poder. 



La cantidad de ensayos de George Orwell es increíble: escribió centenares de ensayos y artículos para dar su opinión sobre todo tipo de temas, desde política hasta literatura y lingüística. Aún hoy en día siguen siendo comentados, y no es de extrañar, puesto que dan mucho que hablar y, sobre todo, que reflexionar. 



Su participación en la Guerra Civil española también ha tenido un gran papel en su obra, ya que habló de sus años en España en Homenaje a Cataluña. En 1936, viajó a Barcelona y se alistó para, y cito, “matar fascistas porque alguien debe hacerlo”. En mayo de 1937 recibió un tiro en el cuello y más tarde relató que estuvo a punto de ser asesinado en Barcelona. En su libro, en el que habla sobre su experiencia en la guerra civil, describe su admiración por los revolucionarios anarquistas y aquellos a favor de la república, pero también critica la manipulación y el control estalinista del Partido Comunista de España. Años más tarde también contó que lo que vivió tuvo un gran impacto en él y que todo lo que escribió a partir de 1936 lo escribió contra el totalitarismo y a favor del socialismo democrático tal y como él lo entendía. 



Pero su novela más conocida, su obra maestra, es la más decisiva en la literatura: 1984, una de las novelas más importantes del género distópico, uno de los libros referentes de este género; junto a Un Mundo Feliz y Fahrenheit 452, podríamos decir que son la Santa Trinidad de la distopía. Escrita en los años 40, narra la historia de Winston Smith, un hombre que vive en una sociedad dominada por el Gran Hermano, a quien toda la población tiene que alabar y adorar como si fuera un dios. Winston es parte de todo esto, y se encarga de reescribir los periodos de la historia que el Partido considera que deben ser adaptados para la “versión oficial de los hechos”, como la llaman, hasta que se replantea la verdad que ha conocido durante toda su vida, la que le cuenta el Partido que los somete.  

El argumento ya de por sí promete, y cuando nos sumergimos en las páginas vemos que las expectativas no se comparan al mundo que ha creado Orwell. Un mundo que no es muy distinto al nuestro: ni a las sociedades totalitaristas de aquella época ni a nuestro día a día. En el libro, para que toda la población esté controlada por el Partido, haciéndoles creer todo lo que ellos quieren que crean, instalan pantallas por todas partes; pantallas que los observan y vigilan las veinticuatro horas del día. La peculiaridad es cuándo fue escrito el libro: en 1949 se publicaba esta obra maestra, que dejaba al planeta entero boquiabierto. La tecnología que se describe en la novela es un evidente reflejo de la tecnología que usamos hoy en día; los móviles o los ordenadores como el que estoy usando ahora para escribir este artículo son dos claros ejemplos de esto. Ahora mismo, y todos lo sabemos, la tecnología nos espía: con sus cámaras, con los micrófonos, y usan nuestras búsquedas en internet y nuestros datos personales; pues eso es lo que hacía la tecnología que Orwell inventó en su libro. ¿Cómo pudo alguien hace más de 70 años inventar algo que está tan presente en nuestras vidas y que era inimaginable en aquella época? Inimaginable para muchos, pero una visión para Orwell. Cierto que él no lo escribió a modo de “profecía”, sino que su mensaje era otro distinto.  

Con este libro, lo que hace este admirable escritor es representar el daño que causa el totalitarismo en la población, cómo engañan a todos para que crean sus ideales, para que piensen que les están salvando cuando lo que hacen es matarlos y enterrarlos vivos. Vivos por fuera, muertos en consciencia. No piensan por sí mismos, no pueden, no saben lo que es, se dejan llevar por la verdad que les dan, la única que conocerán. En la novela, representa el control que tienen los gobiernos sobre las personas con pantallas, para que el mensaje que quiere dar se integre más, sin embargo, todo está basado en las políticas que acechaban en aquellos años a algunos países, que se alzaban con el mando. Lo que nos intenta expresar Orwell (en mi opinión) es la facilidad con la que alguien puede apoderarse del control de una nación y cómo el totalitarismo afecta a la población en todas las maneras posibles. No es una obra de esperanza, e incluso yo diría que no es una obra distópica, es una obra que enseña todo a lo que estaban, están y pueden llegar a estar sometidas todas las personas que tengan un gobierno absolutista dominándolo todo. Más que una imaginación sobre cómo puede ser el futuro, es un retrato de este tipo de sociedades, con algunos toques futurísticos que Orwell ha sabido incorporar con gran maestría. 

Publicar un comentario

0 Comentarios

Ad Code

Responsive Advertisement